Irlanda es un país que no está tan lejos. A pesar de su riqueza cultural, no es uno de los principales destinos para pasar un fin de semana fuera. ¿Será porque Irlanda es lluviosa? ¿O porque no hay nada que hacer allí? Simplemente, en realidad es porque no sabemos mucho de ella, pero no te preocupes, hemos traído una lista de cosas qué hacer en Dublín especialmente si no tienes mucho tiempo.
Dublín es una ciudad pequeña, con menos de sesenta mil habitantes. Así que es posible recorrer la ciudad en un día. Lo cual es muy práctico si quieres descubrir lo máximo posible durante una estancia corta, un fin de semana por ejemplo. Entre la amabilidad de los irlandeses, la forma en que te reciben, las catedrales cargadas de historia, los pubs y bares de fama mundial, sin olvidar la cerveza Guinness, que bate récords, ¡hay mucho que hacer en Dublín!
Qué hacer en Dublín, Irlanda en unas vacaciones cortas
Así que, si quiere saber qué hacer en Dublín, déjate tentar por un viaje, pero descubre más leyendo a continuación.
Conoce el Castillo de Dublín
El Castillo de Dublín es una enorme fortaleza cuyo estado haría pensar que aún residen allí caballeros. Es una de las estructuras medievales mejor conservadas de la ciudad. Y puedes visitarlo.
Conoce las Montañas de Wicklow
Si te gusta la combinación de montañas, senderismo y picnics, las montañas de Wicklow son el lugar ideal para ti. Irlanda es un país de paisajes muy diferentes. Las montañas de Wicklow recuerdan a un plató de cine, con sus majestuosas montañas. Una visita obligada para todos los amantes de la naturaleza.
Conoce el pueblo de Glendalough
Ningún viaje a Irlanda estaría completo sin una visita al pueblo de Glendalough. Se trata de un pequeño pueblo con mercado situado a pocos kilómetros de Dublín. Si quieres saber más sobre la historia de Irlanda, una excursión a Glendalough es justo lo que necesitas.
Da un recorrido a la fábrica y museo de Guinness
Si te gusta la cerveza, te encantará Dublín. En Dublín se encuentran algunos de los mejores bebedores de cerveza del mundo. De hecho, Dublín es la cuna de la cerveza más famosa del mundo: Guinness.
Si el nombre «Guinness» te suena pero no te recuerda a la cerveza, es porque es el nombre que recibe el famoso libro de récords del mundo. Tanto el Libro Guinness de los Récords como la cerveza Guinness fueron inventados por la misma persona, un dublinés.
En Dublín hay un museo dedicado a Guinness. La fábrica donde se produce esta famosa cerveza también está abierta a los visitantes. Hay mucho para entretenerse durante su estancia.
Descubre el puente Ha’penny
A primera vista, este puente no tiene nada de excepcional, pero las fotos que puedes hacerle al atardecer harán que la visita valga la pena. Además, cruzar el puente sólo lleva unos segundos y, lo mejor de todo, ¡es gratis!
Festeja el día de San Patricio
Incluso antes de partir hacia Irlanda, ¿por qué no hacer coincidir tu estancia con el Día de San Patricio? Se trata de una celebración que tiene lugar una vez al año, el 17 de marzo, en honor a San Patricio. Es un día para la cerveza y el buen humor.
Ve a la Catedral de San Patricio
Es una de las catedrales más famosas de Dublín. Se construyó hace varios siglos como homenaje al patrón de la ciudad. También es una de las catedrales que mejor ilustran el dominio católico y la arquitectura neogótica.
Ve al Phoenix Park
Phoenix Park es un parque natural protegido. Se encuentra a nueve kilómetros de Dublín y se puede llegar a él en coche. Este parque no tiene nada de tropical. Es un entorno muy europeo, pero con un encanto y una tranquilidad únicos. Lleva un picnic y disfrutarás de un relajante descanso.
Visita el Temple Bar
La relación de los irlandeses con el alcohol es muy diferente a la de otros países. Y el Temple Bar hace honor a su nombre. Es un auténtico templ, una institución mundialmente conocida que es el orgullo de Dublín.
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Para que conste, el bar donde los irlandeses adoran pasar sus noches varias veces a la semana se inauguró en 1840. Hoy sigue abierto y, al parecer, es tan popular como siempre. ¿No se lo cree? Entra en Internet y echa un vistazo a las críticas del Temple Bar. No encontrarás más que críticas positivas de este lugar legendario.
Visita los Acantilados de Moher
Se trata de uno de los parajes más bellos de todo el país. Los impresionantes acantilados que acarician el mar se elevan orgullosos hasta los 214 metros sobre el nivel del mar. Es una experiencia que debería vivir al menos una vez en la vida.
Visita la biblioteca del Trinity College
La biblioteca del Trinity College es una de las mejor surtidas del Reino Unido. Está abierta a visitantes y ratones de biblioteca de todo el mundo.